miércoles, 30 de agosto de 2023

SANTORAL - SAN RAMÓN NONATO

31 de Agosto


   En Cardona, de Cataluña, san Ramón Nonato, que fue uno de los primeros compañeros de san Pedro Nolasco en la Orden de Nuestra Señora de la Merced, y es tradición que, por el nombre de Cristo, sufrió mucho para la redención de los cautivos. San Ramón nació de familia noble en Portell, cerca de Barcelona, España en el año 1200. Recibió el sobrenombre de non natus (no nacido), porque su madre murió en el parto antes de que el niño viese la luz. Con el permiso de su padre, el santo ingresó en la orden de los Mercedarios, que acababa de fundarse. San Pedro Nolasco, el fundador, recibió la profesión de Ramón en Barcelona.

    Progresó tan rápidamente en virtud que, dos o tres años después de profesar, sucedió a San Pedro Nolasco en el cargo de "redentor o rescatador de cautivos". Enviado al norte de África con una suma considerable de dinero, Ramón rescató en Argel a numerosos esclavos. Cuando se le acabó el dinero, se ofreció como rehén por la libertad de ciertos prisioneros cuya situación era desesperada y cuya fe se hallaba en grave peligro. Pero el sacrificio de San Ramón no hizo más que exasperar a los infieles, quienes le trataron con terrible crueldad. Sin embargo, el magistrado principal, temiendo que si el santo moría no se pudiese obtener la suma estipulada por la libertad de los prisioneros a los que representaba, dio orden de que se le tratase más humanamente. Con ello, el santo pudo salir a la calle, lo que aprovechó para confortar y alentar a los cristianos y hasta llegó a convertir y bautizar a algunos mahometanos. Al saberlo, el gobernador le condenó a morir empalado, pero quienes estaban interesados en cobrar la suma del rescate consiguieron que se le conmutase la pena de muerte por la de flagelación. San Ramón no perdió por ello el valor, sino que prosiguió la tarea de auxiliar a cuantos se hallaban en peligro, sin dejar escapar la menor ocasión de ayudarlos.

    San Ramón encaró dos grandes dificultades. No tenía ya un solo centavo para rescatar cautivos y predicar el cristianismo a los musulmanes equivalía a la pena de muerte. Pero nada lo detuvo ante el llamado del Señor. Consciente del martirio inminente, volvió a instruir y exhortar tanto a los cristianos como a los infieles. El gobernador, enfurecido ante tal audacia, ordenó que se azotase al santo en todas las esquinas de la ciudad y que se le perforasen los labios con un hierro candente. Mandó ponerle en la boca un candado, cuya llave guardaba él mismo y sólo la daba al carcelero a la hora de las comidas. En esa angustiosa situación pasó San Ramón ocho meses, hasta que San Pedro Nolasco pudo finalmente enviar algunos miembros de su orden a rescatarle. San Ramón hubiese querido quedarse para asistir a los esclavos en África, sin embargo, obedeció la orden de su superior y pidió a Dios que aceptase sus lágrimas, ya que no le había considerado digno de derramar su sangre por las almas de sus prójimos.

    A su vuelta a España, en 1239, fue nombrado cardenal por Gregorio IX, pero permaneció tan indiferente a ese honor que no había buscado, que no cambió ni sus vestidos, ni su pobre celda del convento de Barcelona, ni su manera de vivir. El Papa le llamó más tarde a Roma. San Ramón obedeció, pero emprendió el viaje como el religioso más humilde. Dios dispuso que sólo llegase hasta Cardona, a unos diez kilómetros de Barcelona, donde le sorprendió una violenta fiebre que le llevó a la tumba. El santo tenía aproximadamente treinta y seis años cuando murió el 31 de agosto de 1240. Cardona pronto se transformó en meta de peregrinaciones. Fue sepultado en la capilla de San Nicolás de Portell.

    El Papa Alejandro VII lo incluyó en el Martirologio Romano en 1657.San Ramón Nonato es el patrono de las parturientas y las parteras debido a las circunstancias de su nacimiento. La comisión nombrada por el Papa Benedicto XIV propuso suprimir del calendario general la fiesta de San Ramón por la dificultad de encontrar documentos fidedignos sobre su vida.

Oremos 

    ¡Oh! Glorioso San Ramón, a cuyo poder sometió Dios la tierra y los elementos, la salud y la enfermedad, la vida y la muerte, hallando en vuestra poderosa intercesión, abogado las doncellas, sucesión las casadas, defensa los que se ven calumniados, cosecha los labradores, puerto los náufragos, redención los cautivos, vista los ciegos y fin todos los males; por aquel vuestro ardiente deseo de recibir el Santísimo Sacramento, que obligó a Jesucristo a daros de sus benditas manos la sagrada Comunión, os suplico intercedáis por mí para que merezca frecuentar este celestial convite, y recibirle por Viático al fin de mi vida, y sobre todo que pueda obtener la gracia especial que os pido y la eterna felicidad de la gloria. Amén.

-FRASE DEL DÍA-



 

martes, 29 de agosto de 2023

-PROPÓSITO DEL DÍA- "Para que por la práctica de los consejos evangélicos y la vida de oración, podamos crecer en el amor a Dios y nuestros hermanos"



 

EVANGELIO DEL DÍA - 30 de Agosto - San Mateo 13,44-46.


    Carta II de San Pablo a los Corintios 10,17-18.11,1-2.

    
Hermanos: El que se gloría, que se gloríe en el Señor.
    Porque el que vale no es el que se recomienda a sí mismo, sino aquel a quien Dios recomienda.
    ¡Ojalá quisieran tolerar un poco de locura de mi parte! De hecho, ya me toleran.
    Yo estoy celoso de ustedes con el celo de Dios, porque los he unido al único Esposo, Cristo, para presentarlos a él como una virgen pura.

    Palabra de Dios.


Salmo 148(147),1-2.11-13a.13c-14.

Alaben al Señor desde el cielo,
alábenlo en las alturas;
alábenlo, todos sus ángeles,
alábenlo, todos sus ejércitos.

Los reyes de la tierra y todas las naciones,
los príncipes y los gobernantes de la tierra;
los ancianos, los jóvenes y los niños.
alaben el nombre del Señor.

Su majestad está sobre el cielo y la tierra,
y él exalta la fuerza de su pueblo.
¡A él, la alabanza de todos sus fieles,
y de Israel, el pueblo de sus amigos!

¡Aleluya!


    Evangelio según San Mateo 13,44-46.

    Jesús dijo a la multitud: "El Reino de los Cielos se parece a un tesoro escondido en un campo; un hombre lo encuentra, lo vuelve a esconder, y lleno de alegría, vende todo lo que posee y compra el campo.
    El Reino de los Cielos se parece también a un negociante que se dedicaba a buscar perlas finas; y al encontrar una de gran valor, fue a vender todo lo que tenía y la compró."

    Palabra del Señor

MEDITACIÓN DEL EVANGELIO - 30 de Agosto - "Un tesoro escondido"


       Santa Teresa del Niño Jesús (1873-1897) carmelita descalza, doctora de la Iglesia Carta 145


"Un tesoro escondido"

    La esposa [del Cantar] de los Cantares dice que, al no encontrar a su Amado en el lecho, se levantó para buscarle por la ciudad, pero en vano; y que en cuanto salió de la ciudad, encontró al que amaba su alma... (Ct 3,1-4). Jesús no quiere que encontremos en el reposo su presencia adorable; él se esconde... ¡Y qué melodía para mi corazón ese silencio de Jesús...! Él se hace pobre para que nosotras podamos darle limosna, nos tiende la mano como un mendigo, para que cuando aparezca en su gloria el día del juicio, pueda hacernos oír aquellas dulces palabras: «Venid vosotros, benditos de mi Padre, porque tuve hambre y me disteis de comer, tuve sed y me disteis de beber, fui forastero y me hospedasteis, estuve enfermo y en la cárcel y me socorristeis» (Mt 25, 34-36). El mismo Jesús que pronunció estas palabras es quien busca nuestro amor, quien lo mendiga... Se pone, por así decirlo, a nuestra merced. No quiere tomar nada sin que se lo demos.

    Jesús es un tesoro escondido, un bien inestimable que pocas almas saben encontrar porque está escondido, y el mundo ama lo que brilla. ¡Ah!, si Jesús quisiera mostrarse a todas las almas con sus dones inefables, ciertamente ni una sola alma los desdeñaría. Pero él no quiere que le amemos por sus dones: él mismo quiere ser nuestra recompensa.

    Para encontrar una cosa escondida, hay que esconderse también uno mismo. Nuestra vida ha de ser, pues, un misterio. Tenemos que parecernos a Jesús, al Jesús cuyo rostro estaba escondido (Is 53,3)... Jesús te ama con un amor tan grande, que, si lo vieras, caerías en un éxtasis de felicidad..., pero no lo ves y sufres. ¡Pronto Jesús se levantará para salvar a todos los mansos y humildes de la tierra»...! (Sl 75,10).

SANTORAL - SANTA ROSA DE LIMA



    Santa Rosa, virgen, que, insigne desde muy niña por su austera sobriedad de vida, en Lima, en el Perú, vistió el hábito de las Hermanas de la Tercera Orden de Santo Domingo. Entregada a la penitencia y a la oración, y ardiente de celo por la salvación de los pecadores y de la población indígena, aspiraba a dar la vida por ellos, sometiéndose de buena gana a toda clase de sufrimientos para ganarlos para Cristo. Su muerte tuvo lugar el día veinticuatro de agosto. (1617)

Santa Rosa de Lima, Año 1617 

    El Papa Inocencio IX dijo de esta santa un elogio admirable: "Probablemente no ha habido en América un misionero que con sus predicaciones haya logrado más conversiones que las que Rosa de Lima obtuvo con su oración y sus mortificaciones". Lo cual es mucho decir.

    Nacida en Lima, Perú, en 1586 (año de la aparición de la Virgen en Chiquinquirá, [ 9 julio] ) fue la primera mujer americana declarada santa por la Iglesia Católica. En el bautizo le pusieron el nombre de Isabel, pero luego la mamá al ver que al paso de los años su rostro se volvía sonrosado y hermoso como una rosa, empezó a llamarla con el nombre de Rosa.

    Y el Sr. Arzobispo al darle la confirmación le puso definitivamente ese nombre, con el cual es conocida ahora en todo el mundo. Desde pequeñita Rosa tuvo una gran inclinación a la oración y a la meditación. Un día rezando ante una imagen de la Virgen María le pareció que el niño Jesús le decía: "Rosa conságrame a mí todo tu amor".

    Y en adelante se propuso no vivir sino para amar a Jesucristo. Y al oír a su hermano decir que si muchos hombres se enamoraban perdidamente era por la atracción de una larga cabellera ó de una piel muy hermosa, se cortó el cabello y se propuso llevar el rostro cubierto con un velo, para no ser motivo de tentaciones para nadie. Quería dedicarse únicamente a amar a Jesucristo.

    Se propuso irse de monja Agustina. Pero el día en que fue a arrodillarse ante la imagen de la Virgen Santísima para pedirle que le iluminara si debía irse de monja ó no, sintió que no podía levantarse del suelo donde estaba arrodillada. Llamó a su hermano a que le ayudara a levantarse pero él tampoco fue capaz de moverla de allí. Entonces se dio cuenta de que la voluntad de Dios era otra y le dijo a Nuestra Señora: "Oh Madre Celestial, si Dios no quiere que yo me vaya a un convento, desiste desde ahora de su idea".

    Tan pronto pronunció estas palabras quedó totalmente sin parálisis y se pudo levantar del suelo fácilmente. Entonces vino a saber que la más famosa terciaria dominica es Santa Catalina de Siena (29 de abril) y se propuso estudiar su vida e imitarla en todo. Y lo logró de manera admirable. Se fabricó una túnica blanca y el manto negro y el velo también negro para la cabeza, y así empezó a asistir a las reuniones religiosas del templo. Su padre fracasó en el negocio de una mina y la familia quedó en gran pobreza.

    Entonces Rosa se dedicó durante varias horas de cada día a cultivar un huerto en el solar de la casa y durante varias horas de la noche a hacer costuras, para ayudar a los gastos del hogar. Es difícil encontrar en América otro caso de mujer que haya hecho mayores penitencias. No las vamos a describir todas aquí porque muchas de ellas no son para imitar. Pero sí tenemos que decir que lo primero que se propuso mortificar fue su orgullo, su amor propio, su deseo de aparecer y de ser admirada y conocida. Y en ella, como en todas las cenicientas del mundo se ha cumplido lo que dijo Jesús: "quien se humilla será enaltecido". Una segunda penitencia de Rosa de lima fue la de los alimentos.

    Su ayuno era casi continuo. Y su abstinencia de carnes era perpetua. Comía lo mínimo necesario para no desfallecer de debilidad. Aún los días de mayores calores, no tomaba bebidas refrescantes de ninguna clase, y aunque a veces la sed la atormentaba, le bastaba mirar el crucifijo y recordar la sed de Jesús en la cruz, para tener valor y seguir aguantando su sed, por amor a Dios. Dormía sobre duras tablas, con un palo por almohada. Alguna vez que le empezaron a llegar deseos de cambiar sus tablas por un colchón y una almohada, miró al crucifijo y le pareció que Jesús le decía: "Mi cruz, era mucho más cruel que todo esto". Y desde ese día nunca más volvió a pensar en buscar un lecho más cómodo.

    Los últimos años vivía continuamente en un ambiente de oración mística, con la mente casi ya más en el cielo que en la tierra. Su oración y sus sacrificios y penitencias conseguían numerosas conversiones de pecadores, y aumento de fervor en muchos religiosos y sacerdotes. En la ciudad de Lima había ya una convicción general de que esta muchacha era una verdadera santa. Desde 1614 ya cada año al llegar la fiesta de San Bartolomé, el 24 de agosto, demuestra su gran alegría. Y explica el porqué de este comportamiento: "Es que en una fiesta de San Bartolomé iré para siempre a estar cerca de mi redentor Jesucristo". Y así sucedió. El 24 de agosto del año 1617, después de terrible y dolorosa agonía, expiró con la alegría de irse a estar para siempre junto al amadísimo Salvador. Tenía 31 años.

    Los milagros empezaron a sucederse en favor de los que invocaban la intercesión de Rosa, y el sumo pontífice la declaró santa y la proclamó Patrona de América Latina.-

    Rosa de Lima: la más bella rosa que ha producido nuestro continente: no dejes un solo día de rezar a tu gran amigo Jesucristo, por este continente americano tan supremamente necesitado de las bendiciones de Dios.

    Nota:  En el caso de santa Rosa de Lima, su vida ocurrió en el cruce de caminos de las tradiciones populares y la fijación normativa de las cuestiones relativas al culto. Así, a pesar de que murió un 23 de agosto, se la comenzó a celebrar el día 30 de agosto, ya desde el principio, posiblemente porque en ese día se haya trasladado alguna reliquia, o por algún otro acontecimiento semejante. Con esa fecha quedó inscripta en el breviario romano, pero cuando se realizó su proceso canónico, se le asignó la fecha del 26 de agosto (no 23). Un siglo más tarde del proceso, cuando los Bolandistas publican, en 1745, sus "Acta Sanctorum", erudito monumento al saber hagiográfico, ya nadie recuerda exactamente por qué se la celebra el 30 de agosto, así que dicen respecto a esta fecha: "en este día [es decir, el 30 de agosto] la recoge el breviario romano, pero nosotros seguimos la fecha del Calendario Romano [es decir, en ese momento, el 26]" (Acta Sanctorum, agosto, t. VI, pág 543).

    Ya más tarde, la fecha del 26 de agosto, que ni era popular ni era la de su muerte, desapareció como fecha de celebración, y la inscripción en el calendario osciló entre el 23 y el 30 de agosto. El 23 por ser la propia, y el 30 por ser la arraigada popularmente.

    En la actualidad, con la reforma del calendario litúrgico, se tomó la determinación de colocar su fecha litúrgica donde correspondería, es decir, el 23 de agosto, excepto en aquellos territorios donde el 30 de agosto sea tan tradicional, que no tenga sentido moverla, como ocurre en Perú y en muchas diócesis del continente americano.

Oremos

    Gloriosa Santa Rosa de Lima, tú que supiste lo que es amar a Jesús con un corazón tan fino y generoso enséñanos tus grandes virtudes para que, siguiendo tu ejemplo, podamos gozar de tu protección en la tierra y de tu compañía en el cielo. Amén

-FRASE DEL DÍA-



 

lunes, 28 de agosto de 2023

-PROPÓSITO DEL DÍA- "Para que por la práctica de los consejos evangélicos y la vida de oración, podamos crecer en el amor a Dios y nuestros hermanos"



 

EVANGELIO - 29 de Agosto - San Marcos 6,17-29


    Libro de Jeremías 1,17-19.

    En cuanto a ti, cíñete la cintura, levántate y diles todo lo que yo te ordene. No te dejes intimidar por ellos, no sea que te intimide yo delante de ellos.
    Mira que hoy hago de ti una plaza fuerte, una columna de hierro, una muralla de bronce, frente a todo el país: frente a los reyes de Judá y a sus jefes, a sus sacerdotes y al pueblo del país.
    Ellos combatirán contra ti, pero no te derrotarán, porque yo estoy contigo para librarte -oráculo del Señor-".


Salmo 71(70),1-2.3-4a.5-6ab.15ab.17.

Yo me refugio en Ti, Señor,
¡que nunca tenga que avergonzarme!
Por tu justicia, líbrame y rescátame,
inclina tu oído hacia mí, y sálvame.

Sé para mí una roca protectora,
tú que decidiste venir siempre en mi ayuda,
porque tú eres mi Roca y mi fortaleza.
¡Líbrame, Dios mío, de las manos del impío!

Porque tú, Señor, eres mi esperanza
y mi seguridad desde mi juventud.
En ti me apoyé desde las entrañas de mi madre;
desde el seno materno fuiste mi protector.

Mi boca anunciará incesantemente
tus actos de justicia y salvación,
Dios mío, tú me enseñaste desde mi juventud,
y hasta hoy he narrado tus maravillas.

    
    Evangelio según San Marcos 6,17-29.

    Herodes, en efecto, había hecho arrestar y encarcelar a Juan a causa de Herodías, la mujer de su hermano Felipe, con la que se había casado.
    Porque Juan decía a Herodes: "No te es lícito tener a la mujer de tu hermano".
    Herodías odiaba a Juan e intentaba matarlo, pero no podía, porque Herodes lo respetaba, sabiendo que era un hombre justo y santo, y lo protegía. Cuando lo oía quedaba perplejo, pero lo escuchaba con gusto.
    Un día se presentó la ocasión favorable. Herodes festejaba su cumpleaños, ofreciendo un banquete a sus dignatarios, a sus oficiales y a los notables de Galilea.
    La hija de Herodías salió a bailar, y agradó tanto a Herodes y a sus convidados, que el rey dijo a la joven: "Pídeme lo que quieras y te lo daré".
    Y le aseguró bajo juramento: "Te daré cualquier cosa que me pidas, aunque sea la mitad de mi reino".
    Ella fue a preguntar a su madre: "¿Qué debo pedirle?". "La cabeza de Juan el Bautista", respondió esta.
    La joven volvió rápidamente adonde estaba el rey y le hizo este pedido: "Quiero que me traigas ahora mismo, sobre una bandeja, la cabeza de Juan el Bautista".
    El rey se entristeció mucho, pero a causa de su juramento, y por los convidados, no quiso contrariarla.
    En seguida mandó a un guardia que trajera la cabeza de Juan.
    El guardia fue a la cárcel y le cortó la cabeza. Después la trajo sobre una bandeja, la entregó a la joven y esta se la dio a su madre.
    Cuando los discípulos de Juan lo supieron, fueron a recoger el cadáver y lo sepultaron.

    Palabra del Señor

MEDITACIÓN DEL EVANGELIO - 29 de Agosto - «Juan decía a Herodes: «No te es lícito tener a la mujer de tu hermano»

 

Lansperge el Cartujano Sermón: Vivió y murió para Cristo Sermón para la fiesta del martirio de S. Juan Bautista. Opera omnia II, p., 514- 515; 518-519


«Juan decía a Herodes: «No te es lícito tener a la mujer de tu hermano» 

    La muerte de Cristo está al origen de un multitud de creyentes. Por la fuerza del mismo Señor Jesús, y gracias a su bondad, la muerte preciosa de sus mártires y de sus santos ha hecho nacer una gran multitud de cristianos. Jamás, en efecto, la religión cristiana ha podido ser aniquilada por la persecución de los tiranos y la muerte injustificable de inocentes: ella más bien ha obtenido cada vez más un gran aumento.

    Nosotros tenemos un ejemplo en San Juan, el que bautizó a Cristo y por tanto nosotros festejamos hoy el santo martirio. Herodes, ese rey infiel, quiso, por fidelidad a su juramento, borrar completamente de la memoria de los hombres el recuerdo de Juan. Pues, no solamente Juan no fue aniquilado, sino millares de hombres inflamados por su ejemplo, acogerán la muerte con alegría por la justicia y la verdad… ¿qué cristiano, digno de tal nombre, no venera hoy a Juan, el que bautizó al Señor? Por todo el mundo los cristianos celebran su memoria, todos las generaciones lo proclaman bienaventurado y sus virtudes llenan la Iglesia de su perfume. Juan no ha vencido él solo y no ha muerto él solo.

    Juan Bautista, muere por Cristo Juan no vivió para él mismo ni murió para él mismo. ¡A cuántos hombres, cargados de pecados, no habrá llevado a la conversión con su vida dura y austera! ¡Cuántos se habrán visto confortados en sus penas por el ejemplo de su muerte inmerecida! Y a nosotros, ¿de dónde nos viene hoy la ocasión de poder dar gracias a Dios sino por el recuerdo de Juan, asesinado por la justicia, es decir, por Cristo?…

    Sí, Juan Bautista ha ofrecido generosamente su vida terrena por amor a Cristo; ha preferido desobedecer las órdenes del tirano a desobedecer las de Dios. Este ejemplo nos tiene que mostrar que nada ha de ser más importante que la voluntad de Dios. Agradar a los hombres no sirve para mucho; incluso, a menudo perjudica en gran manera… Por tanto, con todos los amigos de Dios, muramos a nuestros pecados y a nuestras preocupaciones, aplastemos nuestro amor propio desviado y procuremos que crezca en nosotros el amor ardiente a Cristo.

SANTORAL - EL MARTIRIO DE SAN JUAN BAUTISTA

29 de Agosto



    Cada 29 de agosto la Iglesia Católica conmemora el Martirio de San Juan Bautista, quien murió decapitado por anunciar y denunciar la verdad. Juan Bautista es el único santo en la Iglesia a quien se le celebra su nacimiento (24 de junio) y su muerte por medio del martirio. Esta memoria “se remonta a la dedicación de una cripta de Sebaste, en Samaria, donde, ya a mediados del siglo IV, se veneraba su cabeza. Su culto se extendió después a Jerusalén, a las Iglesias de Oriente y a Roma, con el título de Decapitación de san Juan Bautista”, según explicó Benedicto XVI en 2013.

    Añadió que “en el Martirologio romano se hace referencia a un segundo hallazgo de la preciosa reliquia, transportada, para la ocasión, a la iglesia de San Silvestre en Campo Marzio, en Roma. Estas pequeñas referencias históricas nos ayudan a comprender cuán antigua y profunda es la veneración de San Juan Bautista”.

    El relato de la muerte de San Juan Bautista está en el Evangelio de San Marcos, capítulo 6, del 17 al 29, en el que narra el banquete ofrecido por Herodes por su cumpleaños, donde danzó Salomé, hija de Herodías, la esposa de su hermano con quien tenía una relación adúltera.

    Según el relato del evangelio, "Herodes había mandado poner preso a Juan Bautista, y lo había llevado encadenado a la prisión, por causa de Herodías, esposa de su hermano Filipos, con la cual Herodes se había ido a vivir en unión libre. Porque Juan le decía a Herodes: 'No le está permitido irse a vivir con la mujer de su hermano'. Herodías le tenía un gran odio por esto a Juan Bautista y quería hacerlo matar, pero no podía porque Herodes le tenía un profundo respeto a Juan y lo consideraba un hombre santo, y lo protegía y al oírlo hablar se quedaba pensativo y temeroso, y lo escuchaba con gusto". El baile le gustó tanto a Herodes que le prometió a la joven cumplirle cualquier deseo. Por eso ella, a sugerencia de su madre, pide la cabeza de Juan Bautista, la cual le fue entregada en una bandeja.

San Juan Bautista, mártir de la verdad

    El 30 de agosto de 2012, Benedicto XVI dedicó su catequesis de la Audiencia General a esta memoria. "La Iglesia celebra hoy la memoria del Martirio de San Juan Bautista, el precursor de Jesús, que testimonia con su sangre su fidelidad a los mandamientos de Dios. Su vida nos enseña que cuando la existencia se fundamenta sobre la oración, sobre una constante y sólida relación con Dios, se adquiere la valentía de permitir que Cristo oriente nuestros pensamientos y nuestras acciones", dijo.

    Benedicto XVI destacó que "celebrar el martirio de san Juan Bautista nos recuerda también a nosotros, cristianos de nuestro tiempo, que no se puede descender a negociar con el amor a Cristo, a su Palabra, a la Verdad. La Verdad es verdad y no hay componendas".

    "La vida cristiana exige, por decirlo de alguna manera, el 'martirio' de la fidelidad cotidiana al Evangelio, es decir, el valor de dejar que Cristo crezca en nosotros y sea Él quien oriente nuestro pensamiento y nuestras acciones. Pero esto sólo puede suceder en nuestra vida si la relación con Dios es sólida".

    "La oración no es tiempo perdido, no es robar espacio a las actividades, incluso a las apostólicas, sino que es exactamente lo contrario: sólo si somos capaces de una vida de oración fiel, constante y confiada, será el mismo Dios quien nos dará la capacidad y la fuerza para vivir de modo feliz y sereno, para superar las dificultades y testimoniarlo con valor. Que san Juan Bautista interceda por nosotros, a fin de que sepamos conservar siempre la primacía de Dios en nuestra vida", agregó.

Oremos

    Dios nuestro, que quisiste que San Juan Bautista fuera el precursor de tu Hijo, tanto en su nacimiento como en su muerte, concédenos que, así como él dio su vida por dar testimonio de la verdad y de la justicia, así también nosotros entreguemos generosamente la nuestra al testimonio y servicio del Evangelio. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos. Amén

-FRASE DEL DÍA-