martes, 16 de abril de 2024

GAUDETE ET EXSULTATE

CAPÍTULO QUINTO
COMBATE, VIGILANCIA Y DISCERNIMIENTO
El discernimiento


    168. Esto resulta especialmente importante cuando aparece una novedad en la propia vida, y entonces hay que discernir si es el vino nuevo que viene de Dios o es una novedad engañosa del espíritu del mundo o del espíritu del diablo. En otras ocasiones sucede lo contrario, porque las fuerzas del mal nos inducen a no cambiar, a dejar las cosas como están, a optar por el inmovilismo o la rigidez. Entonces impedimos que actúe el soplo del Espíritu. Somos libres, con la libertad de Jesucristo, pero él nos llama a examinar lo que hay dentro de nosotros ―deseos, angustias, temores, búsquedas― y lo que sucede fuera de nosotros —los «signos de los tiempos»— para reconocer los caminos de la libertad plena: «Examinadlo todo; quedaos con lo bueno» (1 Ts 5,21).


-PROPÓSITO DEL DÍA- "Para que por la práctica de los consejos evangélicos y la vida de oración, podamos crecer en el amor a Dios y nuestros hermanos"



 

EVANGELIO - 17 de Abril - San Juan 6,35-40.


   Libro de los Hechos de los Apóstoles 8,1b-8.

    Ese mismo día, se desencadenó una violenta persecución contra la Iglesia de Jerusalén. Todos, excepto los Apóstoles, se dispersaron por las regiones de Judea y Samaría.
    Unos hombres piadosos enterraron a Esteban y lo lloraron con gran pesar.
    Saulo, por su parte, perseguía a la Iglesia; iba de casa en casa y arrastraba a hombres y mujeres, llevándolos a la cárcel.
    Los que se habían dispersado iban por todas partes anunciando la Palabra.
    Felipe descendió a una ciudad de Samaría y allí predicaba a Cristo.
    Al oírlo y al ver los milagros que hacía, todos recibían unánimemente las palabras de Felipe.
    Porque los espíritus impuros, dando grandes gritos, salían de muchos que estaban poseídos, y buen número de paralíticos y lisiados quedaron curados.
    Y fue grande la alegría de aquella ciudad.


Salmo 66(65),1-3a.4-5.6-7a.

¡Aclame al Señor toda la tierra!
¡Canten la gloria de su Nombre!
Tribútenle una alabanza gloriosa,
digan al Señor: «¡Qué admirables son tus obras!»

Toda la tierra se postra ante ti,
y canta en tu honor, en honor de tu Nombre.
Vengan a ver las obras del Señor,
las cosas admirables que hizo por los hombres.

El convirtió el Mar en tierra firme,
a pie atravesaron el Río.
Por eso, alegrémonos en él,
que gobierna eternamente con su fuerza.


    Evangelio según San Juan 6,35-40.

    Jesús dijo a la gente: "Yo soy el pan de Vida. El que viene a mí jamás tendrá hambre; el que cree en mí jamás tendrá sed.
    Pero ya les he dicho: ustedes me han visto y sin embargo no creen.
    Todo lo que me da el Padre viene a mí, y al que venga a mí yo no lo rechazaré, porque he bajado del cielo, no para hacer mi voluntad, sino la de aquel que me envió.
    La voluntad del que me ha enviado es que yo no pierda nada de lo que él me dio, sino que lo resucite en el último día.
    Esta es la voluntad de mi Padre: que el que ve al Hijo y cree en él, tenga Vida eterna y que yo lo resucite en el último día".

    Palabra del Señor

MEDITACIÓN DEL EVANGELIO - 17 de Abril - “Yo soy el pan de vida. El que venga a mí, nunca tendrá hambre”


Santa Madre Teresa de Calcuta (1910-1997) fundadora de las Hermanas Misioneras de la Caridad La palabra para ser hablada, cap. 6


“Yo soy el pan de vida. El que venga a mí, nunca tendrá hambre”

    ¿Dónde encontráis la alegría de amar? En la eucaristía, la santa comunión. Jesús mismo se hizo "pan de vida" para darnos vida. Noche y día está allí. Si vosotros realmente queréis crecer en el amor, volved a la eucaristía, a esta adoración. En nuestra congregación, teníamos la costumbre de tener la adoración una vez a la semana durante una hora; después, en 1973, decidimos tener la adoración cada día durante una hora. Tenemos mucho trabajo; por todas partes nuestras casas para enfermos y moribundos indigentes están llenas. Pero a partir del momento en que comenzamos la adoración cada día, nuestro amor por Jesús se volvió más íntimo, nuestro amor por cada uno más benévolo, nuestro amor por los pobres más compasivo.

    Mirad el tabernáculo y ved lo que significa ahora este amor. ¿Soy consciente de eso? ¿Mi corazón es lo bastante puro para que vea allí a Jesús? Con el fin de que para vosotros y para mí sea más fácil ver a Jesús, él mismo se hizo "pan de vida"; con el fin de que pudiéramos recibir la vida, una vida de paz, una vida de alegría. Encontrad a Jesús y encontraréis la paz.

SANTORAL - SANTA KATERI TEKAKWITHA

17 de Abril


  Kateri Tekakwitha (1656-1680), laica, india de América del Norte (Estados Unidos y Canadá), llamada también “lirio de los Mohawks”, muerta tres años después de su bautismo.

    La América norteamericana ya tiene su santa india. Una figura extraordinaria llena de encanto, testigo de lo que la gracia divina hace en quien, con toda la inocencia de una juventud incontaminada, se deja llevar por su impulso. Kateri Tekakwitha vivió mucho en pocos años. Murió consagrada a Dios a los 24 años.

    En el inmenso territorio descubierto en el siglo XVI, se establecieron poco a poco colonias de todas las procedencias, ambicionando establecerse en aquellas grandes praderas. En medio de la presencia holandesa y luego inglesa, vivió una joven india mohawk.

    La santa ha realizado muchos milagros privados. La conocida como “el lirio de los mohawks” tiene su santuario nacional en Fonda, Nueva York. Fue fundado en honor de Kateri, en el lugar donde fue bautizada el domingo de Pascua, 5 de abril de 1676, y aquí vivió sus años de adolescencia.

    Kateri nació en 1656 de una madre algonquina cristiana --raptada por los iroqueses y casada con un jefe mohawk--, en la aldea fortificada de Mohawk Canaouaga u Ossernenon (moderna Auriesville), en el actual estado de Nueva York.

    Cuando sólo tenía cuatro años, quedó huérfana, debido a una epidemia de viruela. Kateri sobrevivió pero quedó marcada de cicatrices y con una visión reducida. Kateri fue apodada "tekakwitha", que significa "la que choca contra las cosas". Fue acogida por su tío, que se oponía duramente a la evangelización.

    Cuando Kateri tenía diez años, en 1666, una partida de guerra compuesta de soldados franceses e indios hostle de Canadá destruyó las fortalezas mohawk en la orilla sur del río Mohawk. Los mohawks supervivientes se trasladaron a la parte norte del río. Kateri vivió en Caughnawaga, sede del actual santuario, los siguientes diez años.

    Cuando tenía 18 años, inició la catequesis en secreto y finalmente su tío dio su consentimiento para que se convirtiera al cristianismo, a condición de saliera del pueblo indio. Tras caminar unos 320 kilómetros por el bosque hasta llegar a Sault Ste. Marie, un pueblo cristiano cerca de Montreal, en 1677. El asentamiento indio era conocido como Kahnawake, al otro lado del río San Lorenzo, fue denominado "El pueblo de los indios que rezan".

    El día de Navidad de 1677, Kateri hizo la primera comunión y, en la Fiesta de la Anunciación de 1679, hizo voto de virginidad perpetua. Se ofreció a la Santísima Virgen María para que la aceptara como hija. En los últimos años de su vida, soportó un gran sufrimiento por una enfermedad grave. Murió el 17 de abril de 1680, poco antes de cumplir 24 años, y fue enterrada en Kahnawake, Quebec, Canadá. Sus palabras finales fueron: "Jesús, María, os amo".

Oremos

    Señor Dios, Tú llamaste a la virgen Santa Kateri, para brillar en el pueblo indio americano como un ejemplo de la inocencia de la vida. A través de su intercesión, todos los pueblos de toda raza, lengua y nación, después de haber sido recogido en tu iglesia, proclamemos tu grandeza en un canto de alabanza. Te lo pedimos por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo y el Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos. Amén

-FRASE DEL DÍA-



 

lunes, 15 de abril de 2024

GAUDETE ET EXSULTATE

CAPÍTULO QUINTO
COMBATE, VIGILANCIA Y DISCERNIMIENTO
El discernimiento


    Una necesidad imperiosa

    167. Hoy día, el hábito del discernimiento se ha vuelto particularmente necesario. Porque la vida actual ofrece enormes posibilidades de acción y de distracción, y el mundo las presenta como si fueran todas válidas y buenas. Todos, pero especialmente los jóvenes, están expuestos a un zapping constante. Es posible navegar en dos o tres pantallas simultáneamente e interactuar al mismo tiempo en diferentes escenarios virtuales. Sin la sabiduría del discernimiento podemos convertirnos fácilmente en marionetas a merced de las tendencias del momento.


-PROPÓSITO DEL DÍA- "Para que por la práctica de los consejos evangélicos y la vida de oración, podamos crecer en el amor a Dios y nuestros hermanos"



 

EVANGELIO - 16 de Abril - San Juan 6,30-35


    Libro de los Hechos de los Apóstoles 7,51-60.8,1a.

    Esteban decía al pueblo, a los ancianos y a los escribas: "¡Hombres rebeldes, paganos de corazón y cerrados a la verdad! Ustedes siempre resisten al Espíritu Santo y son iguales a sus padres.
    ¿Hubo algún profeta a quien ellos no persiguieran? Mataron a los que anunciaban la venida del Justo, el mismo que acaba de ser traicionado y asesinado por ustedes, los que recibieron la Ley por intermedio de los ángeles y no la cumplieron".
    Al oír esto, se enfurecieron y rechinaban los dientes contra él.
    Esteban, lleno del Espíritu Santo y con los ojos fijos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús, que estaba de pie a la derecha de Dios.
    Entonces exclamó: "Veo el cielo abierto y al Hijo del hombre de pie a la derecha de Dios".
    Ellos comenzaron a vociferar y, tapándose los oídos, se precipitaron sobre él como un solo hombre; y arrastrándolo fuera de la ciudad, lo apedrearon. Los testigos se quitaron los mantos, confiándolos a un joven llamado Saulo.
    Mientras lo apedreaban, Esteban oraba, diciendo: "Señor Jesús, recibe mi espíritu".
    Después, poniéndose de rodillas, exclamó en alta voz: "Señor, no les tengas en cuenta este pecado". Y al decir esto, expiró. 
    Saulo aprobó la muerte de Esteban.


Salmo 31(30),3cd-4.6.7b.8a.17.21ab.

Sé para mí una roca protectora,
un baluarte donde me encuentre a salvo,
porque tú eres mi Roca y mi baluarte:
por tu Nombre, guíame y condúceme.

Yo pongo mi vida en tus manos:
tú me rescatarás, Señor, Dios fiel.
Confío en el Señor.
¡Tu amor será mi gozo y mi alegría!

Que brille tu rostro sobre tu servidor,
sálvame por tu misericordia.
Tú los ocultas al amparo de tu rostro
de las intrigas de los hombres.


    Evangelio según San Juan 6,30-35.

    La gente dijo a Jesús: "¿Qué signos haces para que veamos y creamos en ti? ¿Qué obra realizas?
    Nuestros padres comieron el maná en el desierto, como dice la Escritura: Les dio de comer el pan bajado del cielo".
    Jesús respondió: "Les aseguro que no es Moisés el que les dio el pan del cielo; mi Padre les da el verdadero pan del cielo; porque el pan de Dios es el que desciende del cielo y da Vida al mundo".
    Ellos le dijeron: "Señor, danos siempre de ese pan".
    Jesús les respondió: "Yo soy el pan de Vida. El que viene a mí jamás tendrá hambre; el que cree en mí jamás tendrá sed.

    Palabra del Señor

MEDITACIÓN DEL EVANGELIO - 16 de Abril - “El pan de Dios, es el que desciende del cielo y da la vida al mundo”


Balduino de Ford (¿-c. 1190) abad cisterciense, después obispoEl sacramento del altar II, 3; SC 93

  
“El pan de Dios, es el que desciende del cielo y da la vida al mundo”

    Cristo es "el pan de la vida" para los que creen en él: creer en Cristo es comer el pan de vida, es poseer en sí a Cristo, es poseer la vida eterna…

    "Yo soy el pan de vida, dice; vuestros padres comieron maná en el desierto, y murieron" (Jn 6,48s). Por ahí hay que comprender la muerte espiritual. ¿Por qué murieron? Porque creían lo que veían; no comprendían lo que no veían… Moisés comió maná, Aarón lo comió y muchos otros también los que agradaron a Dios y que no murieron. ¿Por qué no murieron? Porque comprendieron espiritualmente, tuvieron hambre espiritual, probaron espiritualmente el maná para ser saciados espiritualmente. "He aquí el pan que baja del cielo: el que lo coma no morirá" (v. 50).

    Este pan, es decir Cristo mismo el que hablaba así, estaba prefigurado en el maná, pero puede más que el maná. Porque el maná mismo no podía impedir morir espiritualmente… Pero los justos vieron en el maná a Cristo, creyeron en su venida, y Cristo, cuyo maná era el símbolo, les concede a todos aquellos que creen en él no morir espiritualmente. Por eso dice: "este es el pan que ha bajado del cielo; el que lo come no morirá". Aquí sobre la tierra, aquí ahora, delante de vuestros ojos, vuestros ojos de carne, aquí se encuentra "el pan bajado del cielo". "Yo, soy el pan vivo, que ha bajado del cielo" (v. 51). El "pan de la vida" desde siempre llamado "pan vivo". Pan vivo, porque él mismo posee la vida que permanece y porque puede librar de la muerte espiritual y dar vida. Primero dijo: "el que lo coma no morirá "; ahora habla claramente de la vida que da: "el que come este pan vivirá eternamente" (v. 58).

SANTORAL - SANTA BERNARDITA SOUBIROUS

16 de Abril


    Santa Bernardette nació el 7 de enero, de 1844 en el pequeño pueblo de Lourdes, en las hermosas montañas de los Pirineos franceses. En su bautismo le pusieron el nombre de Marie-Bernard, pero desde pequeña la llamaban por el diminutivo "Bernardette".

    Su padre Francisco era un hombre honesto y recto pero no muy capaz en los negocios. Trabajó como molinero para los Casterot, una familia acomodada. Vivía con su familia en el molino de Boly. Su madre, Luisa Casterot, se casó a los 16 años. Se pensaba que así su futuro estaría asegurado pero las cosas no resultaron de esa manera. Cuando los clientes venían a moler su trigo, la joven pareja les servía una comida completa. Esto podía hacerse en tiempos de abundancia, pero llegó a hacer crisis en tiempos de estrechez.

    Las deudas forzaron a los Soubirous a dejar el molino y albergarse en una celda, propiedad de un primo de Francisco, que había sido parte de una prisión. En un solo cuarto vivían los seis, el padre, la madre y los cuatro hijos. Los mayores eran las mujeres, Bernardette la primera, después de ella venía Toinette (dos años y medio más joven), y luego los dos varones, Jean-Marie y Justin. Para conseguir el escaso pan para los niños, Francisco y Luisa tomaban todo tipo de trabajos que podían encontrar.

    Cuando nació Bernardette la familia todavía tenía recursos. Una prueba de ello es que la niña fue confiada a una nodriza por seis meses. La nodriza, llamada Marie Avarant y de casada Lagues, vivía en Bartres, en el campo a 5 millas de Lourdes. Marie Lagues amamantó a Bernardette por 15 meses, desde junio de 1844 a octubre de 1845. De acuerdo con la costumbre ambas familias quedaron muy unidas entre sí.

    Las dificultades económicas de la familia Soubirous dio oportunidad a Marie para pedir hacerse cargo de Bernardette. El pretexto fue que le ayudase con otros niños, pero en realidad la quería para el pastoreo de ovejas. Quedó así como una pastorcita contratada aunque sin paga.

    Al ir a Bartres le prometieron que podría prepararse con el sacerdote del lugar para hacer su Primera Comunión. Tenía casi 14 años y era la única niña de su edad en Lourdes que no la había recibido. Pero al ver que era muy buena en su trabajo, la obligaban a pasar más tiempo cuidando las ovejas, lo que no le permitía asistir a las clases de catecismo. Los dos niños de la familia donde vivía se marchaban todas las mañanas a las clases de catecismo, mientras a ella le exigían marcharse al campo a pastorear. Esto le dolía mucho en su corazón.

    Ha surgido un interrogante sobre la inteligencia de Bernardette. Muchos sugieren que no era inteligente. Es cierto que ella aprendía con dificultad y hasta ella misma decía que tenía "mala cabeza", queriendo decir que tenía poca memoria. Al habérsele negado la posibilidad de estudiar, Bernardette, a los 13 años de edad, todavía no sabía ni leer ni escribir. El maestro Jean Barbet, quién en una ocasión le dio clases de catecismo, decía de ella: "Bernardette tiene dificultad en retener las palabras del catecismo porque no puede estudiarlas, ya que no sabe leer, pero ella hace un gran esfuerzo en comprender el sentido de las explicaciones. Aún mas, ella es muy atenta y, especialmente, muy piadosa y modesta". Sin duda Bernardita había sabido cultivar un gran tesoro de Dios: un corazón adornado de las mas bellas virtudes cristianas: inocencia, amabilidad, bondad, caridad y dulzura.

    El sacerdote de Bartres, Abbé Arder, si bien se marchó a un monasterio poco después que llegara Bernardette, en los pocos contactos que tuvo con ella pudo captar la excelencia de su corazón. El tenía mucha fe en las apariciones de La Salette(1846), ocurridas once años atrás y así comparaba a Bernardette con los niños de La Salette.

    Decía: "Ella me parece una flor toda envuelta con perfume divino. Yo le aseguro que en muchas ocasiones cuando la he visto, he pensado en los niños de La Salette. Ciertamente, si la Santísima Virgen se le apareció a Maximino y a Melania, lo hizo en orden a que ellos se convirtieran en simples y piadosos como ella." Ni la ignorancia, ni la pobreza, ni el aspecto enfermizo de Bernardette le previnieron de apreciar en ella la simplicidad y la piedad.

  Decía el Sacerdote en una ocasión: "Mira a esta pequeña. Cuando la Virgen Santísima quiere aparecerse en la tierra, ella escoge niños como esta" Sus palabras fueron proféticas ya que a los pocos meses la Virgen se le comienza a aparecer en la gruta de Massabielle, cerca de Lourdes.

    Cuando Bernardette vio que su deseo de prepararse para recibir la Comunión no era posible en Bartres, le pidió a María Lagues que le permitiera ir a Lourdes donde insistió a sus padres que le concedieran regresar a casa. Quería recibir la Primera Comunión y tendría que empezar las clases de catecismo inmediatamente quería recibirla en 1858. Sus padres accedieron y regresó a Lourdes el 28 de enero, de 1858, solo 14 días antes de la primera aparición de la Virgen.

    Es importante, por lo tanto, comprender la razón por la que Bernardette se encontraba en Lourdes cuando tenía 14 años y comenzaron las apariciones: ella buscaba con todo su corazón recibir la Santa Comunión. Las Virgen visita a un alma muy pura llena de amor por su Hijo, un alma dispuesta a cualquier sacrificio para llevar a cabo la obra de Dios. Bernardette, al verse impedida de recibir la comunión, recurre a la Virgen, reza diariamente el rosario y la Virgen le abre las puertas. La Virgen sabe que puede confiar en ella el trascendente mensaje que desea comunicar al mundo.


    El 16 de abril de 1879, exclamó emocionada: "Yo vi la Virgen. Sí, la vi, la vi ¡Que hermosa era!" Y después de unos momentos de silencio exclamó emocionada: "Ruega Señora por esta pobre pecadora", y apretando el crucifijo sobre su corazón se quedó muerta. Tenía apenas 35 años.

    A los funerales de Bernardita asistió una muchedumbre inmensa. Y ella empezó a conseguir milagros de Dios en favor de los que le pedían su ayuda. Y el 8 de diciembre de 1933, el Santo Padre Pío Once la declaró santa. Bernardita: tú que tuviste la dicha de ver a la Santísima Virgen aquí en la tierra, haz que nosotros tengamos la dicha de verla y acompañarla para siempre en el cielo.

Oremos
    
    ¡Oh bienaventurada Bernardita! Acuérdate que la Virgen te dijo en la Gruta: "Ruega por los pecadores", para que se conviertan y hagan penitencia. Ruega por mí, pecador, para que Dios perdone mis pecados. Ruega por mí a María Inmaculada, pues confío en que te concederá cuanto la pidas, porque fuiste su confidente en la Gruta de Lourdes. Así como Ella te prometió "hacerte feliz en el otro mundo", te concederá que hagas felices a los que devotamente acudan a ti. A ti, pues, acudo humildemente, suplicándote no me dejes ni me abandones hasta verme contigo en el cielo. Amén.

Enséñanos a creer
como Tú has creído.

Enséñanos a amar a Dios
y a nuestros hermanos
como Tú los has amado.

Haz que nuestro amor
hacia los demás sea siempre
paciente, benigno y respetuoso.
¡Oh Virgen Santísima de Lourdes,
míranos clemente en esta hora!
-Juan Pablo II

Te pedimos Señor, que nosotros tus siervos,
gocemos siempre de salud de alma y cuerpo;
y por la intercesión de Santa Maria,
bajo su advocación de la Virgen de Lourdes,
líbranos de las tristezas de este mundo,
concédenos las alegrías del cielo,
y la gracia especial que solicitamos
Por Cristo Nuestro Señor. Amén.

-FRASE DEL DÍA-